domingo, 30 de octubre de 2011

Love and live.

Mi mente está ¿nublosa, nublada? Bah, qué cojones importa, ahora no tengo tiempo para pensar en esas chorradas. Simplemente quiero que tú sepas que mi cabeza no está ahora como para pensar en cosas sin importancia. ¿Lo conozco? Sí. Pero... ¿él sabe quién soy?. Sí, supongo que sí. He hablado un par de veces con él para ir a conciertos de su grupo, pero poco más. Me paso el día en su tuenti... ¿Él visitará el mío? ¿Sabrá realmente lo que siento por él? No sé, no sé, que no lo sé! Solo sé que rompe con los esquemas de mi vida. No es el prototipo de chico perfecto, quizás por eso me gusta. Sé 4 o 5 cosas de él y sus fotos sí que me las se de memoria, las amigas con las que sale en las fotos... El caso es que cuando me ve me dedica una sonrisa de oreja a oreja, y yo no sé como interpretarlo. Sé que si fuera lista iría a por él, pero resulta que cada vez que hablo con el me siento estúpida, como si no fuera lo bastante buena para él... En fin. La verdad es que no sé ni como lo conozco. De todo esto solo puedo sacar una conclusión: sé que no soy su tipo de chica, quizá piense que con una chica como yo no saldría nunca, pero eso me da igual. Me gusta romper las reglas, los retos, objetivos imposibles y que sepas que me da igual lo que pienses, porque yo voy a por todas.

No, no quiero que me des la luna.

Adictivo. Esa es la palabra: adictivo. Sé que soy tu esclava, que me tienes atada, que haces conmigo lo que te da la real gana.   Aunque sé que en el fondo me quieres, esto se te acaba nene. No voy a ser más tuya, voy a vivir mi vida y aunque el corazón se me parta por la mitad llegará un día que dejaré de sentir esto por ti. Se me olvidaran los buenos ratos que pasamos juntos. Y en ese momento, tú, para joder todas las leyes del universo, para desestabilizar mi perfecta vida, vendrás de rodillas pidiéndome perdón e intentando volver a atraparme entre tus redes. Pues ¿sabes qué?. Esta vez no, lo tuyo no tiene perdón, nunca supiste lo que tenías hasta que lo perdiste. Hasta nunca, amor :).  

Dicen, dicen, dicen muchas cosas, pero en verdad no saben nada.

Dicen que sonrío porque mi vida es fácil. Pues no, las personas que más han sufrido suelen ser las que más sonríen, las que más disfrutan de los momentos especiales que nos ofrece esta vida, ya que saben valorarlos más que las personas que siempre los tienen. Dicen que soy una exagerada, que la mínima cosa me la tomo a mal. Yo soy de las personas que seleccionan a sus amigos por las pequeñas cosas, por los pequeños detalles, aquellos que marcan la diferencia entre los que te quieren como eres, y los que pretenden cambiarte. Dicen que lo hago todo bien, que nunca me equivoco en nada. Eso es mentira. Me equivoco, soy humana, con todos mis defectos y virtudes, pero solo aquella gente que me quiere me dirá lo que he hecho mal, y me apartará del hoyo al que iba a caer para seguir el camino, aunque muchas veces no sea tan fácil como dar la espalda y dejar que te caigas... 

sábado, 29 de octubre de 2011

El jardín de mis recuerdos.

Cuando era pequeña, cuando era la hora de dormir, si sobrepasaban las 12 me imaginaba una bruja al lado de mi cama, asustándome y diciéndome que había sido mala. Recuerdo que siempre intentaba irme a dormir antes de esa hora, para no encontrarme con aquella bruja mala que quería hacerme daño y asustarme. Llevaba una berruga enorme en la nariz, era feísima y tenia un gorro en forma de punta y una escoba con la que salía volando cuando venía mi madre. Mi madre siempre me dijo lo mismo: ''Las brujas no existen, son producto de tu imaginación, ahora duérmete''- y me daba un beso de buenas noches. Pues querida mamá, ahora que tengo algo de experiencia en esta vida te corregiré: ''Las brujas sí que existen, pero no son como las pintan en los cuentos. Algunas son más guapas que nosotras y no llevan ni gorro ni escoba, ni intentan asustarnos, pasan a la acción directamente: nos joden la vida de la forma más horrible que pueden''. 

Te quiero.

Puedo ser la oveja negra de todo esto. Puedo ser el pájaro que nunca fue enjaulado. Puedo ser la mariposa que no completó la metamorfosis. Puedo ser la rana que besó la princesa. Puedo ser el viento que te golpea en las mejillas. Puedo ser la luz que hace brillar tus ojos. Puedo ser la sonrisa la cual te vuelve loco. Puedo ser la flor que sale en primavera. Puedo ser tu lado más salvaje. Puedo ser la intensa mirada que cautiva tus ojos. Puedo ser el sueño que no te deja dormir por las noches. Puedo ser tu conciencia. Puedo ser todo lo que ronda por tu cabeza. Por ti hoy puedo ser lo que quieras que sea. 

Cuestión de princesas.

¿Cómo no quieren que busquen a su príncipe azul si en todas las películas disney se encuentra uno? Sí, todas y cada una de nosotras nos sentimos como princesas, en cierta parte desgraciadas por las cosas que nos pasan, y esperamos encontrar un príncipe azul. De hecho, creemos que nos lo merecemos, ya que somos princesas de esas guapísimas y perfectas chicas que salen en las películas de fantasía. Pero con una princesa sin un príncipe azul no hay un cuento de hadas. Aunque ¿sabéis qué?. Yo no lo busco. Soy diferente a cualquier cosa con la que me compares. Me gustan los defectos, de hecho la perfección la veo con los pequeños defectos de la persona con la que quiero compartir mi vida, porque realmente, por alguna cuestión u otra sé que me gustan, y que aunque a veces resulten algo pesados, me resultará más interesante vivir con ellos que tener una vida ''perfecta'' y monótona con la que todo el mundo sueña, me gustan los desafíos y me aburre la rutina. 



¿Por qué fiarse del reloj si cada vez que lo miras señala una cosa distinta?

¿Por qué fiarse del reloj si cada vez que lo miras señala una cosa distinta? Siempre marcando el momento en el cual debemos de dejar de disfrutar, el momento en el cual sustituimos nuestra felicidad por alguna cosa que nos gusta menos hacer. Toda nuestra vida esta marcada por el tiempo, fechas de acontecimientos, momentos en que fuimos felices, momentos en los que no lo fuimos... ¿Cómo sería una vida sin reloj? Desenfrenada, tranquila, emocionante, adictiva... Pero si eso ocurriera, no podríamos decir cuándo nos sucedieron las cosas, y no recordaríamos esas fechas y momentos especiales el los que fuimos felices...

Breaking.